Acudió al Hospital Provincial de Castelló para recibir su tratamiento, como cada 21 días, y se encontró con una negativa como respuesta al tener el permiso de residencia caducado.
©diarioinformacion.-Después de diez años viviendo en España, Hanane B., de 29 años y nacionalidad marroquí, ha visto cómo la Sanidad española le ha de lado cuando más la necesita. Hace cinco años le diagnosticaron un cáncer de mama, que a día de hoy presenta metástasis óseas, y que requiere un tratamiento periódico de quimioterapia. Cuál fue su desagradable sorpresa cuando el miércoles acudió al Hospital Provincial de Castelló para recibir su tratamiento, como cada 21 días, y se encontró con una negativa como respuesta al tener el permiso de residencia caducado. Además, cuando solicitó que le recetaran parches para el dolor, la médico le informó de que no podía «pautar más medicación hasta que no solucione con la Seguridad Social su condición de asegurado».
«Tiene el cáncer muy avanzado y le niegan la quimioterapia. Van a dejarla que muera así. No tienen sentimientos», se lamenta Mustafá, marido de Hanane. Ambos residen actualmente en Valencia, aunque el tratamiento se inició en Castelló en 2008, ya que por entonces vivían en Burriana. Durante varios años, Hanane dispuso de tarjeta sanitaria pero se la retiraron hace tres meses al estar en trámites para renovar su permiso de residencia, que caducó en diciembre de 2011.
El pasado miércoles Hanane acudió al Hospital Provincial de Castelló como cada 21 días para someterse al tratamiento paliativo de quimioterapia. El primer problema que se encontró es que no estaba su médico habitual, quien posiblemente no le hubiera solicitado su tarjeta sanitaria. No obstante, la doctora que la atendió le manifestó que figura como no asegurada y que el Abucasis, sistema para la gestión sanitaria, «le impide recetar más medicación hasta que no solucione con la Seguridad Social su condición de asegurado», según consta en el informe médico de Oncología del citado centro hospitalario, al que ha tenido acceso este periódico.
PARA SEGUIR LEYENDO. PINCHEAQUÍ
80 euros cada caja