Ryanair ha confirmado este martes la advertencia lanzada la semana pasada y recortará en España un millón de asientos durante la temporada de invierno. En el caso del aeropuerto Seve Ballesteros-Santander, el ajuste será especialmente severo: la aerolínea reducirá un 38% su programación, lo que supone la supresión de las conexiones con París, Milán (Bérgamo), Viena y Roma.
Desde el Ejecutivo autonómico han confirmado la decisión y no descartan que pueda afectar también a alguna otra ruta. La medida llega tras semanas de incertidumbre, ya que en la web de Ryanair no figuraban billetes disponibles para estas líneas a partir de finales de octubre, cuando arranca la campaña invernal.
El golpe es significativo para el aeródromo cántabro, que ya venía registrando una tendencia descendente en el número de pasajeros desde finales de 2023.
Hace apenas unos días, la Consejería de Turismo se remitía al contrato en vigor con la compañía y aseguraba que no había recibido comunicación oficial sobre posibles cancelaciones. En aquel momento, el departamento insistía en que el Gobierno regional trabaja “para mantener, aumentar y mejorar los trayectos” con Ryanair y con el resto de operadoras.