Las restricciones impuestas tras los rebrotes, con limitaciones de aforo, han hundido la facturación de banquetes y tiendas de moda, cuyas ventas se han parado «brúscamente» según nos informan desde el sector.
Las bodas celebradas en Cantabria han caído hasta un 60 por ciento entre marzo y julio, los meses de la pandemia. La mayoría, ya sean civiles o religiosas, han sido aplazadas a finales de año o, directamente, a 2021. La pandemia y las restricciones impuestas tras los rebrotes, con limitaciones de aforo,han hundido la facturación de banquetes y tiendas de moda, cuyas ventas se han parado «brúscamente» según nos informan desde el sector.
Desde los servicios de protocolo de los Ayntamientos de Santander y Torrelavega se ha llamado a las parejas «una por una» para avisarles de las nuevas restricciones de aforo y confirmar si mantenían la fecha.
Pese a que, en principio, no ha habido muchas anulaciones, sí se ha percibido que existe «incertidumbre». No ayuda que, hasta nueva orden, novios e invitados estén obligados a guardar las distancias y a llevar mascarilla en todo momento. Tampoco que se tengan que restringir las muestras de afecto.
Ante esta situación, os ayuntamientos han dado todas las facilidades para que quienes quisieran posponer los enlaces pudieran hacerlo; así, muchas parejas han optado por darle la vuelta al calendario y mirar ya a 2021.
El Obispado, por su parte, confirma que las bodas celebradas en los últimos meses han sido «muy escasas». Aunque las que tenían fecha para el mes de julio por lo general se han mantenido, la mayoría cambiaron la suya antes del salto a la nueva normalidad.
En las tiendas de lencería y novias se habla ya de «desastre económico», a pesar de recibirse nuevos modelos para estas ceremonias. Aunque al acabar el estado de alarma se pensó en este tipo de tiendas que se podría remontar «sin llegar a recuperar», los últimos rebrotes han dinamitado todas las previsiones.
La restricción de aforos ha afectado por completo a estos negocios, ya que las bodas que antes superaban los 100 invitados ahora no pasan de 25 invitados.
Toda esta inquietud es similar lógicamente en los restaurantes al aplazarse sine die el algunso casos los banquetes.