La película dirigida por Alberto Rodríguez se ha alzado además con los premios a mejor director, actor, guion original y actriz revelación – Cuatro ‘cabezones’ se lleva ‘El niño’, tres ‘Ocho apellidos vascos’ y dos ‘Mortad
La 29º edición de los Premio Goyaencumbró a «La Isla mínima» como la gran triunfadora del año en la fiesta del cine español, que anoche puso el broche de oro almejor año de la historia de la cinematografía nacional. Con un total de 10 galardones de los 17 a los que aspiraba, incluidos los premios de mejor película, mejor dirección, mejor actor principal (Javier Gutiérrez), mejor actriz revelación (Nerea Barros) y mejor guión original, la joya del cine ‘noir’ que firma Alberto Rodriguez en la España de los 80 en las marismas del Guadalquivir se alzó como la gran ganadora de la noche, como vaticinaban todos los pronósticos y venció el pulso al thriller rival, ‘El niño’, de Daniel Monzón, que aspiraba a 16 galardones y obtuvo únicamentecuatro estatuillas en apartados técnicos.
La otra gran derrotada de la noche fue la cinta ‘Magical Girl’, de Carlos Vermut, que también partía como una de las favoritas tras su éxito en el Festival de San Sebastián y donde sólo la electrizanteBárbara Lenniese hizo con un merecidísimo premio a mejor actriz .»Me he tirado a los abismos contigo, Carlos Vermut», le declaró una emocionada Lennie al director durante su discurso de agradecimiento.
En el apartado de intérpretes se cumplieron todos los pronósticos, porque también Javier Gutiérrez obtuvo el premio a mejor actor por su interpretación en la otra mitad del tándem de ‘La isla mínima’. Y también el elenco del fenómeno más taquillero del cine español,’Ocho apellidos vascos’,de Emilio Martínez Lázaro se alzó con los tres galardones a los que aspirabanKarra Elejalde(actor de reparto), Carmen Machi(actriz de reparto)y Dani Rovira(actor revelación), que recibieron aplausos infinitos del público.
Por su parte, la coproducción argentino-española ‘Relatos Salvajes’, nominada en las categorías de mejor película y mejor dirección,sólo fue distinguida con el premio a mejor película iberoamericana, un galardón más que esperado aunque insuficiente para el aclamado mosaico de historias negras que firmó Damián Szifrón, que aspiraba a nueve estatuillas. Luego, la cinta polaca ‘Ida’ se alzó con elpremio a mejor película europea.
En cuanto a las novedades de la ceremonia, el galardonado actor y humorista Dani Rovira condujo una gala entretenida aunque descafeinada,donde sobró el humor pero faltó el espíritu crítico que ha impregnado galas anteriores; máxime en un contexto en que, si bien el sector firmó en 2014 una cuota de mercado del 25% con 123 millones de euros por primera vez en tres décadas, el IVA cultural alcanza el 21%.
El director de la Academia, Enrique González Macho, hizo una breve alusión a la principal losa que pesa sobre el cine español y se dirigió en su discurso al ministro de Cultura, José Ignacio Wert, que este año, a diferencia del anterior, estuvo presente en la gala.»Ya va siendo hora de que nos bajen el maldito IVA»,expresó Macho, que también dedicó un canto optimista al futuro del séptimo arte en España. «Nadie que esté entusiasmado por su trabajo, puede temer por su futuro», pronunció, «estáis aquí los culpables de lo que ha pasado este año, habéis creído en lo que tenías que creer, este año ha sido absolutamente excepcional para el cine español».
Otro momento emotivo de la gala tuvo lugar en la entrega del Goya honorífico, que este año recayó sobreAntonio Banderasy que recibió a manos dePedro Almodóvar, también hostil al ministro de Cultura. «Amigos de la cultura y del cine español… Señor Wert, no está incluido en esto», manifestó el cineasta manchego.
Por su parte, Banderas manifestó que»hoy comienza la segunda parte del partido de mi vida».Y después de múltiples números musicales y discursos de gratitud, culminó la fiesta más esperada de los amantes del cine nacional donde, entre premios merecidos y aspiraciones frustradas, el gran ganador de la noche fue, más que nunca, el cine español.
