El escritor y periodista afirma «que no puede defenderse y que lo que se hace es frivolizar sobre relaciones que no tienen valor, salvo el morbo que suscitan».
El escritor y doctor en Periodismo, José Ramón Saiz, pidió el jueves con motivo de la presentación de su último libro en Torrelvega»un respeto hacia la figura de Carmen Díez de Rivera, fallecida de cáncer en 1999y sobre cuya figura se está frivolizando en una serie que está emitiendo Tele 5 por los amores del ministro Serrano Suñer con su madre, la marquesa de Llanzol».
José Ramón Saiz realizó estas declaraciones al señalar que «el 15 de diciembre -día de la presentación del libro- de hace cuarenta años los españoles votamos por recuperar la libertad y cerrar el capítulo de la dictadura y el autoritarismo del régimen de Franco». Al evocar esta jornada»en la que expresé por primera vez mi voto»- el historiador evocó su etapa enPuebloy»mis contactos con Carmen Díez de Rivera, entonces jefa del gabinete de la Presidencia del Gobierno que ocupaba Adolfo Suárez. Carmen-dijo-fue siempre una mujer que trabajó eficazmente por la democracia y a los objetivos de Suárez en la transición, siempre la recordaré por su simpatía y disposición a cuántos la llamábamos para confirmar o desmentir informaciones sobre el ambicioso y complejo proceso político de la Transición», añadiendo que siempre «guardaré un grato recuerdo de su trabajo en el objetivo de Suárez de llevarnos a una democracia occidental».Carmen Díez de Rivera fue llamada entonces la Musa de la Transición.
Dijo que con la serie que está ofreciendoTele 5se está invadiendo íntimidad personal, obviando «su vida y entrega a ideales sobre los que dejó su impronta como europarlamentaria hasta que falleció». A este respecto, recordó la emotividad de la intervención de la presidenta del Parlamento Europeo al comunicar a los diputados su fallecimiento, destacando de su vida «sus valores de honestidad e independencia por encima de consignas de partidos».
El escritor y periodista afirmó»que no puede defenderse al morir en 1999 y que lo que se hace es frivolizar sobre relaciones que no tienen valor, salvo el morbo que suscitan».
